La cocina es alegría” expresa doña Rosita Rojas, cocinera tradicional de Tribunas, y desde ese espíritu, junto a un grupo de personas portadoras de saberes de cocina tradicional y guarda de semillas, mantendrán vivo -en pleno Covid19- el taller Recetas con Amor, donde mediante material audiovisual y kits acompañarán a quienes participen en la producción, preparación y consumo de cocinas patrimoniales.
El taller Recetas con Amor ha facilitado un encuentro entre la comunidad y el rico patrimonio alimentario y culinario del corregimiento de Tribunas, Colombia. Aunque el contexto de crisis sanitaria interrumpió la forma tradicional de sostener ese espacio, la creatividad de un grupo de cocineras/os tradicionales, custodias/s de semillas y gestores culturales logró abrir un especial camino: las mismas abuelas de Tribuna visitarán cada hogar.
Estos días personas portadoras de saberes y técnicas alimentarias, junto a la Escuela Comunitaria de Artes y Oficios Los Orobíes, están en plena producción audiovisual para compartir su conocimiento incluso más allá de su territorio, con quienes quieran comprender este valioso patrimonio inmaterial desde la voz de una comunidad que lo vive, recrea y nutre en su día a día. Un kit con todo lo necesario para aprender practicando, llegará también a los hogares.
Esta propuesta se inspira en los tres momento de las cocinas tradicionales: producción, preparación y consumo. Entonces, la primera fase “Las semillas, el origen de la vida y las cocinas tradicionales”, incluirá material audiovisual sobre el banco de semillas de la Escuela Comunitaria, historias de vida de un custodio de semillas y un cocinero tradicional, y técnicas tradicionales de siembra y conservación de semillas. Se entregará también el “Canasto de los saberes: entre manteles y semillas compartimos nuestras cocinas”, que contiene un balde para siembra, un palín, tierra abonada, variedades de semillas y semilleros.
En la segunda visita, correspondiente a la etapa “Recetas con amor: las abuelas de Tribunas cocinan con nuestra familia”, se entregará material audiovisual con las preparaciones gastronómicas de mayor significado para cocineras/os tradicionales, quienes compartirán sus técnicas culinarias y métodos de cocción tradicionales. El ingrediente principal de estas preparaciones lo constituirán las semillas entregadas en el canasto de saberes. Diez kits de cocina compuestos por cuchillos, tablas de cocina, vasos precipitados y elementos de protección personal compondrán esta entrega.
La última etapa vinculada al momento del consumo, se llama “El comedor, un lugar para alimentarse con amor y compartir en familia”, e incluye una secuencia de videos con ejercicios prácticos de Buenas Prácticas de Manufactura. Este material está especialmente dirigido al fortalecimiento de cocineras tradicionales del corregimiento y otras personas interesadas. Se entregará una dotación de elementos de servicio a portadores de la tradición.
De esta forma se dará continuidad a procesos que se han desarrollado en el corregimiento y que han avanzado en la apropiación del patrimonio alimentario e implementación de estrategias de salvaguardia de las cocinas tradicionales, en un territorio donde lo culinario tiene un lugar especial, tal como para Mildrey Correa -cocinero tradicional parte de esta iniciativa- lo tiene la cocina en un hogar: “la cocina es el todo, sin ella uno se muere de hambre, es lo primordial de la casa, es la oficina del hogar”.